Diatermia / Tecarterapia FISIOWARM 7.0
INDICACIONES TERAPÉUTICAS
El calor alivia las condiciones crónicas traumáticas e inflamatorias, incrementa el flujo sanguíneo mejorando la nutrición celular, favorece la eliminación de toxinas y mejora la elasticidad del tejido conectivo.
La vasodilatación obtenida con el calor favorece el intercambio de sustancias que facilitan el drenaje de la zona inflamada y el flujo local de células destinadas a procesos reparadores.
FISIOESTÉTICA DERMATOFUNCIONAL
La energía suministrada por Fisiowarm 7.0, a través de modalidades específicas y electrodos especiales para cada zona de tratamiento, favorece un importante estímulo biológico de los tejidos tratados, lo que permite un mejor flujo de oxígeno y elementos nutritivos y favorece la eliminación de sustancias inflamatorias y de líquido en exceso.
Desde hace más de 20 años, la tecarterapia resulta muy eficaz también en el campo de la medicina estética y en las fases posoperatorias de la cirugía plástica. Bioestimula los tejidos, lo que contribuye a reparar la piel, atenuar las cicatrices, reafirmar la dermis estimulando también la eliminación de catabolitos tóxicos y radicales libres.
✔ PARA EL CUIDADO FACIAL: Por su acción estimulante celular, a través de la tecarterapia, la piel recibe un mayor flujo sanguíneo y, por tanto, una mejor oxigenación que repercute positivamente en las células superficiales y en la dermis profunda. Ejerce un efecto lifting inmediato en las fibras de colágeno, creando así un efecto tensor en la zona tratada.
✔ PARA TRATAR LA CELULITIS: la tecarterapia aumenta la velocidad del flujo sanguíneo, lo que genera un incremento en la producción de oxígeno que favorece la actividad metabólica y la eliminación de toxinas. Al reducir la inflamación, mejora la circulación venosa y linfática mediante el uso sinérgico de técnicas de masaje específicas.
✔ PARA REAFIRMAR LOS TEJIDOS: la tecarterapia, configurada con unos ajustes específicos de potencia, frecuencia y duración del tratamiento, estimula la microcirculación sanguínea y linfática, con la consiguiente mejoría de la tonicidad de la piel tratada. Los resultados se pueden mejorar también con el efecto tensor que ejercen los grupos musculares subyacentes a la zona, que se pueden entrenar durante el tratamiento.
Para obtener resultados significativos y duraderos, siempre se recomienda crear un programa terapéutico multidisciplinar que se proponga mejorar del estilo de vida del paciente y que incluya una guía nutricional correcta, ejercicio terapéutico específico y, si fuera necesario, otras terapias físicas coadyuvantes.